Por qué El lobo de Wall Street puede ser tu mejor película motivacional
Jun 22, 2021
Todo el mundo ha oído hablar de El lobo de Wall Street. No solo fue un éxito de taquilla, sino que también tiene una trama extravagante llena de divertidas aventuras. Lo mejor de la película es que está basada en una historia real de Belfort y su empresa de inversiones, Stratton Oakmont.
Si quieres tener tanto éxito como El lobo de Wall Street, aquí tienes algunas lecciones que puedes aprender de esta icónica película:
- Hazte amigo de tus empleados.
Todas las personas que trabajaron bajo las órdenes de Jordan Belfort estaban dispuestas a dar su vida por la empresa. Como Belfort se hizo amigo de todos sus empleados y les brindó un ambiente de trabajo fraternal, fue fácil ganarse su confianza y hacer que trabajaran muy duro para su empresa. En lugar de dejar que sus subordinados se sientan como si fueran sus jefes, es importante desarrollar vínculos fuertes con su equipo. Incluso fuera del trabajo, Belfort fue capaz de mantener relaciones individuales con cada uno de sus empleados. A medida que el vínculo se hizo más estrecho, los empleados se mostraron más dispuestos a trabajar más duro para la empresa.
Con esta lección, aprenderás a motivar a tu equipo creando siempre un ambiente agradable en la oficina. No dejes que las personas piensen que trabajan para ti, sino que hazles sentir que trabajan contigo para alcanzar un objetivo común.
- No juzgues basándose en el pasado.
Puede resultar fácil juzgar o eliminar a personas de su equipo debido a sus experiencias pasadas. Incluso si su equipo está lleno de personas que carecen de experiencia y conocimientos, debe centrarse en su personalidad y ética de trabajo. Belfort contrató a varias personas "incorrectas" para su organización, pero al final todo resultó a su favor. Como Belfort les dio a estas personas la oportunidad de demostrar su valía, se sintieron en deuda y, por lo tanto, trabajaron aún más duro para su empresa.
Si necesitas contratar a alguien o delegar una tarea, no temas darle una oportunidad a la persona menos calificada. Las personas cambian para mejor y, a veces, eso puede beneficiarte de maneras inimaginables. Como emprendedor, no temas arriesgarte con las personas sin juzgarlas por su pasado.
- Vístete para el éxito
En Stratton Oakmont, se les pedía a los empleados que siempre estuvieran bien vestidos, con traje y corbata. Esto no solo generaba disciplina, sino que también mejoraba la autoestima y les permitía desempeñarse mejor. Belfort hizo un esfuerzo adicional y encargó trajes a medida para los empleados de Stratton Oakmont, pero usted puede comenzar pidiendo a sus empleados que siempre estén bien vestidos.
Cuando uno entra a una oficina en la que todos los empleados visten trajes, se percibe una sensación de profesionalismo y se transmite una imagen positiva. En términos de trabajo en equipo y motivación, sentirse bien con la propia ropa puede contribuir a aumentar los niveles de productividad, ya que aumenta la disposición para trabajar. Alcanzar los objetivos de una organización se vuelve bastante fácil cuando uno ve a todos vestidos para el éxito.
Si buscas motivación para vestir siempre un elegante abrigo y corbata, este lienzo de El lobo de Wall Street puede inspirarte. Si te despiertas todos los días y lees la cita “ No duermas como si fueras rico, trabaja como si estuvieras en la ruina ”, siempre recordarás exactamente el tipo de éxito inigualable por el que estás trabajando.
- Ir a reuniones sociales.
Aunque las reuniones sociales en El lobo de Wall Street fueron algo problemáticas, no se puede negar que contribuyeron a establecer una cultura corporativa sólida. Cuando un equipo puede pasar tiempo junto fuera del trabajo y divertirse, puede resultar en una gran formación de equipo y una mayor motivación para todos. Stratton Oakmont siempre fue creativo con la planificación de eventos, por lo que es importante ser lo más innovador posible a la hora de reunir a su equipo.
Considere la posibilidad de planificar una divertida aventura juntos o irse de vacaciones, algo que otros lugares de trabajo no suelen hacer. Al crear un sentido de exclusividad en un equipo, puede motivarse fácilmente a sí mismo y a las personas que lo rodean.
Recuerde que las reuniones sociales no tienen por qué dar como resultado una mala reputación para su empresa o sus empleados. Como dice Gary Vee, “la reputación es la moneda más valiosa”. Si desea seguir pagando sus facturas, mantenga intacta su reputación.
- Ten cuidado con el sacrificio.
Cuando se trata de dirigir un negocio o establecer una carrera, algunas personas están dispuestas a hacer sacrificios increíbles por ello. Otras, sin embargo, no quieren hacer concesiones en absoluto y siempre dejan su carrera en segundo plano. Para entender qué extremo del espectro es mejor, puedes inspirarte en Belfort en El lobo de Wall Street. Si bien las personas que observaron su éxito y estilo de vida asumieron que era inmensamente rico desde el principio, el hecho es que tuvo que hacer muchos sacrificios para llegar allí.
No todos los sacrificios valen la pena. Belfort tuvo que pasar por un divorcio, ingerir drogas e incluso tratar mal a las personas en un intento por alcanzar el éxito. Hirió a las personas que le importaban y, en última instancia, también las perdió. En este caso, sacrificar la vida personal por una carrera ciertamente no es la lección clave. Si bien puede parecer fácil tomar decisiones tóxicas que podrían resultar en recompensas instantáneas, es importante que los emprendedores eviten esos impulsos y actúen racionalmente. Esforzarse es una cosa, pero hacer que toda su vida gire en torno a su carrera es, sin duda, otra.
En lugar de desechar tus valores para el éxito, aprende a integrar las dos partes de tu vida. De esa manera, podrás evitar el detrimento emocional que enfrentó Belfort y dirigirte directamente al trono del éxito.
- No te tomes la vida demasiado en serio.
Es fácil sentirse abrumado por el trabajo y las responsabilidades. Sin embargo, El lobo de Wall Street nos enseña la increíble lección de no tomar la vida demasiado en serio. Belfort nunca tuvo miedo de tomar una decisión alocada, sin importar las consecuencias. En lugar de dejarse llevar por el estrés de ser empresario, es importante disfrutar del camino tanto como deseamos disfrutar del éxito y del dinero.
Hablando de dinero, este Pop Art del Lobo de Wall Street puede ser un recordatorio artístico y estético para que siempre persigas tus objetivos.
Como emprendedor, es importante dar el salto de fe. Incluso si no tienes éxito en tu objetivo, al menos puedes tener una experiencia agradable.